Tips de vino

Los vinos tintos deben elaborarse necesariamente con uvas tintas. Las pieles de estas uvas, que es donde se encuentra el color, permanecen en contacto con el jugo de uva durante la fermentación, dando color al vino. La variedad de vinos tintos depende de los tipos de uvas utilizadas en el proceso de elaboración.
Sus principales características son:

  • El color, que puede variar desde un púrpura profundo hasta un rubí pálido. A medida que envejece, sus colores brillantes y juveniles se vuelven granates e incluso marrones.
  • Los taninos, los cuales se encuentran en las pieles y semillas y confieren complejidad, textura y estructura al vino y lo protegen del avinagramiento con la edad. Son la fuente de la sensación de sequedad en la boca.
  • Su amplia gama de aromas y sabores. Las diferentes variedades de uva producen matices de frutas, flores, hierbas, especias y caracteríticas terrosas.
  • El dulzor o nivel de sequedad el cual está detrerminado por el azúcar residual que queda después de la fermentación. Así entre más dulce más viscoso.
  • La acidez, la cual está determinada por las condiciones climáticas de la zona donde se sembró la vid y sirve como conservante además de aportar frescura y estructura. El vino tinto tiene varios tipos de ácidos, aunque el tartárico y el málico son los principales.
    En función del tiempo de envejecimiento que se realice en la barrica y en la botella , pueden obtenerse vinos jóvenes, crianzas, reservas o grandes reservas.
  • Entre las variedades de uva más conocidas para su elaboración están: Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Carignan, Carmenere, Grenache, Malbec, Merlot, Petit Verdot, Pinot Noir, Sangiovese, Syrah, Tannat, Tempranillo, Zinfandel.

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